Hoy en día se lee, se escucha y se habla sobre como cuidar el Medio Ambiente en el que vivimos. Hemos aprendido a apagar luces innecesarias, cerrar bien el grifo, utilizar vehículos con menor consumo y muchas técnicas más para preservar los recursos naturales que año tras año disminuyen en cantidad y en calidad, mientras la población humana sigue aumentando en número. Hace unos pocos años atrás aparecieron los contenedores para separar la basura y ahora ya nos hemos acostumbrado a separar plástico, papel, vidrio, etc. Esta buena costumbre puede ir acompañada de una labor muy especial e interesante como el vermicompostaje doméstico de residuos orgánicos.
Esta técnica es la que realiza la naturaleza normalmente en el ecosistema y consiste en que las lombrices y microorganismos coman y reciclen la materia orgánica que tiramos habitualmente a la cesta de basura. Este proceso natural se viene realizando desde hace unas décadas en granjas de lombricultura para obtener abonos orgánicos de calidad. Hoy en día se estudia la labor de la lombricultura como una opción de reciclaje que es mucho más sustentable que la incineración o vertido.
Las lombrices que se utilizan por lombricultores en España son la Eisenia andrei y la Eisenia fétida, conocidas como lombrices rojas californianas, ambas muy adaptadas a las condiciones climáticas y de cautividad, lo que permite una buena producción de abono a partir de residuos orgánicos. Estas lombrices tienen la capacidad de comer su peso por día, es decir si tenemos 1 kilo de lombrices (aproximadamente unas 2000 lombrices) serán capaces de comer un kilo de residuo. Esta importante capacidad le da un valor ambiental en la gestión de residuos.
Hay muchas formas de criar lombrices para obtener Humus de Lombriz y reciclar residuos orgánicos. Existen numerosos artículos sobre la cría y reproducción en los que se puede ir aprendiendo más sobre la biología, alimentación y reproducción de estos anélidos. Como datos de interés se puede visitar la página web www.ecocelta.com.
Para los que quieren comenzar la actividad en la propia casa y reciclar los residuos de la cocina o jardín, Ecocelta desarrolló y patentó un kit doméstico de vermicompostaje que ocupa poco espacio y como resultado final se obtiene el mejor Biofertilizante orgánico, el Humus de Lombriz. Muchos ya conocen la bondades de este abono natural que puede reemplazar el abono químico sin dañar el medio ambiente. Es fácil de conseguirlo, así que hoy explicaremos como hacer Humus de Lombriz con algunos restos de cocina y así disminuir la cantidad de restos orgánicos que van a vertedero o a incineración, contaminando con CO2 y requiriendo un gasto adicional en transporte, combustibles y tiempo.
Los restos de cocina más habituales para hacer vermicompostaje son:
Café, té, restos de verduras trituradas (lechuga, acelga, espinaca, etc), cáscaras de fruta triturada, cáscara de patatas, pan rallado, uvas. legumbres, papel de cocina húmedo. “Ojo”: No agregar carne ni pescado.
DÓNDE Y CÓMO?
El kit de vermicompostaje doméstico creado Ecocelta está compuesto por 3 contenedores especiales y un núcleo de lombrices rojas californianas. Un carro con ruedas para su fácil traslado, instrucciones y aplicaciones. Primero cuando el kit está armado se coloca en un lugar cómodo y cerca de la cocina (puede estar al exterior), luego se le va agregando los residuos (comida para la lombriz) lo más picado posible ya que no tienen dientes hasta un máximo de 20 cm por semana. La lombriz irá alimentándose desde abajo hacia arriba, entonces cuando supere la altura del primer contenedor se coloca el segundo y ellas solas irán subiendo dejando debajo el humus hecho.
Cuando se llega al tercer contenedor se desarma el sistema y se obtienen 60 litros del mejor humus de lombriz, listo para usar en cualquier planta que necesite abono (césped, flores, frutales, etc). El proceso dura aproximadamente unos 3 meses desde que comenzamos a alimentar con los restos de cocina.
Las ventajas son muchas
Comencemos por la principal “ Estamos colaborando con la disminución de residuos” Reciclamos, reducimos y reutilizamos un residuo que de otra forma hubiese costado energía tratarlo. Obtenemos el mejor abono natural hecho con residuos que contienen micro y macronutrientes ideales para abonar cualquier tipo de planta y que nos ahorra dinero.
Las lombrices no se escapan, viven y se regulan en población ellas mismas, no siendo necesario en condiciones normales adquirir nuevas lombrices. Al contrario puedo utilizar el sistema para reproducir las mejores lombrices para pesca!!!. Y dentro de muchas más ventajas podemos conocer más los mecanismos que tiene la naturaleza para reciclar los residuos orgánicos. Si quiere contribuir en el cuidado del Medio Ambiente reciclando sus propios residuos orgánicos piense en ser un lombricultor doméstico y luego abone sus plantas con el mejor abono natural.
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