Para muchas personas, las vacaciones han llegado a su fin e irremediablemente toca volver al trabajo. Las largas jornadas de trabajo ocupan todo nuestro tiempo, y en muchas ocasiones, debemos realizar algunas comidas en sus instalaciones. Aunque siempre existe un restaurante cerca de cualquier lugar, cocinar en casa y llevarnos la comida a la oficina es una opción más que recomendable. No solo nos permite cuidar nuestra economía; también previene la ingesta de alimentos no demasiado sanos de manera habitual, que pueden causar problemas de salud de diferente gravedad.
Resulta conveniente, por tanto, saber qué alimentos sanos podemos llevarnos a nuestro lugar de trabajo, sin que se deterioren en el transporte y sean beneficiosos para nuestra salud.
A continuación te ofrecemos unos consejos que ayudarán a planificar un menú sano y adaptado a las circunstancias. ¡Tenlos en cuenta y aplícalos!
Planifica tu menú sano con estos consejos… ¡y disfruta de él en la oficina!
1-Convierte a la fruta en tu mejor aliada.
¿Quién no ha tenido el antojo de picar entre horas en la oficina? Cada vez que vemos a algún compañero comer, es normal que queramos disfrutar nosotros también de ese placer.
Y si, lo podemos hacer, siempre y cuando seleccionemos muy bien los alimentos que ingiramos en esos momentos. La fruta es el mejor tipo de alimentos para ello. Existen multitud de tipos de fruta, por lo que no será difícil encontrar aquellos que más encajen con nuestros gustos, y por tanto, nos produzcan una mayor motivación para comerlos.
Algunas frutas, incluso, son muy fáciles de comer en la oficina, sin necesidad de tener cuchillos para pelarlas; el plátano, la manzana, la pera, la ciruela… pueden comerse a bocados y ofrecen una gran multitud de beneficios para nuestro cuerpo, entre los que encontramos el mantenimiento de nuestro peso.
2-Agua
El agua es fundamental, lo sabemos, y sin embargo es muy fácil prescindir de ella en el trabajo. El café y los refrescos pueden pasar a un primer plano, aunque no resulten tan beneficiosos para nuestro organismo.
Por lo tanto, resulta altamente recomendable tener una botella de agua a mano siempre, sin necesidad de tener que desplazarnos de nuestra mesa de trabajo para disfrutar de unos buenos tragos.
Podemos disfrutar del agua siempre que queramos, sin remordimientos ni límite. Es fundamental para nuestra hidratación y para tener una piel tersa y bonita.
3-Las ensaladas
¿Qué mejor manera de alimentarse en la oficina que disfrutando de una buena ensalada? Las ensaladas se pueden transportar de manera muy sencilla, no necesitan calentarse y es uno de los platos más recomendables, nutricionalmente hablando.
Además, una ensalada acepta una gran multitud de alimentos, por lo que no nos cansaremos de un mismo sabor.
¡Cuanto más colorido tenga, más nutrientes aportará!
4-Recetas secas
Como el arroz, la fideuá y la carne, aunque eso sí, sin abusar. Estos platos resultan verdaderamente interesantes para llevarnos a la oficina, pues se transportan cómodamente y permiten comerlo sin ensuciarse demasiado.
Además de tener en cuenta estas recetas, te ofrecemos otros trucos que te ayudarán a mantener la línea:
- No te saltes el desayuno: El tiempo aprieta durante muchas mañanas, lo sabemos. Pero tomarse nuestro tiempo para realizar un desayuno completo y tomarlo tranquilamente mejora nuestra figura… y también nuestra paz mental.
- Evita los ultraprocesados: Aunque resulten muy cómodos de transportar, no son los más sanos. Si bien es cierto que de vez en cuando podemos disfrutar de su comodidad, no deben ser habituales en nuestros planes alimenticios.
- Tómate el tiempo que necesites para comer: Las prisas no son buenas, pues hacen que ingiramos los alimentos sin masticar lo suficiente, y nuestro cuerpo no los digiere bien. Es importante respetar el tiempo de comida, hacerlo con tranquilidad, y, si nos da tiempo, salir a dar una vuelta justo después de comer. Estiraremos las piernas y nos relajaremos.
- Si necesitamos una ayuda para cuidar nuestra figura, Lineaherbal puede ser nuestra aliada. Sus productos nos permiten cuidar nuestra salud y mejorar nuestra autoestima. ¡Pruébalos!
Con estos consejos, cuidar nuestra salud en la oficina será pan comido. ¡Y nunca mejor dicho!
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